La Guardia Civil rescata a 58 inmigrantes en aguas italianas y detiene a tres traficantes de seres humanos

Así, señala que el avión del Servicio Aéreo de la Guardia Civil desplazado a Italia en el marco de la denominada Operación Tritón detectó, el pasado lunes 22 de julio, a unos 250 kilómetros de la costa italiana en el Mar Jónico, a un velero navegando a motor con unas 25 personas en cubierta.

Mientras esperaban la llegada de las patrulleras enviadas por las autoridades FRONTEX para el rescate de estas personas, explica que la tripulación del avión inspeccionó el velero consiguiendo tomar fotografías y vídeos que identificaban a los autores del delito de tráfico de seres humanos, en este caso tres individuos de nacionalidad ucraniana.

Durante el desarrollo de esta operación, según el relato de la Guardia Civil, se escucha por radio como otro barco pide ayuda a unos 170 kilómetros de allí, por lo que rápidamente se pone rumbo a la zona y se localiza a otro velero al pairo con 20 inmigrantes, de lo que se informa a las autoridades italianas, que envían una patrullera para proceder a su rescate.

Una vez asegurado el rescate del segundo barco, el avión español vuelve a la zona del primero y comprueba igualmente que dos embarcaciones pertenecientes al dispositivo montado por FRONTEX están próximas al barco.

En definitiva, apunta que esta intervención ha permitido rescatar a 38 inmigrantes irregulares de origen africano en la primera embarcación detectada y otros 20 de origen sirio en la segunda, deteniendo a tres ciudadanos ucranianos como responsables del tráfico de seres humanos, los cuales han ingresado en prisión provisional sin fianza.

OPERACIÓN TRITÓN

La Guardia Civil viene participando en la denominada Operación Tritón, de la Agencia Europea de Fronteras Exteriores (FRONTEX) desde el mes de diciembre de 2014. Para ello, colabora con el empleo de medios navales y aéreos desplegados en la costa sur de Italia, incluidas las islas de Sicilia y Lampedusa, en donde llevan prestando sus servicios desde el año 2012 dentro de la antigua Operación HERMES.

La misión principal de los guardias civiles allí desplegados es el auxilio y rescate de los inmigrantes procedentes de África y los que huyen de países árabes en conflicto, como Siria, o a causa de las acciones del Estado Islámico.

Finalmente, el instituto armado asegura que para la lucha contra las redes de tráfico de seres humanos, resulta imprescindible que en el momento que se producen esos rescates sean identificados los patrones de los barcos y sus ayudantes, pertenecientes todos ellos a las bandas que se lucran de la situación de los inmigrantes y que, con estas acciones, ponen en riesgo la vida de los que pretenden alcanzar las costas europeas.