Carmen le hará ver que aún tiene muchas cosas por descubrir fuera de su silla de ruedas. Pasando consulta, Mateo conoce a Lucas, un niño de seis años algo inquieto que le hace despertar su instinto, no parará hasta descubrir que padece algo más que celos de su hermana pequeña y lo más importante, que la pediatría da más satisfacciones de las que pensaba.
Nuria vuelve de su baja con muchas ganas de trabajar. Llevará con Cristina el caso de Sandra Salas, la antigua adjunta de ésta que llega al hospital con lo que parece una simple gastroenteritis. Sandra es una adicta al trabajo y su pasión por la investigación lo único que la hace vivir. De inmediato Nuria ve en ella un referente. Edu se encuentra en un dilema en su relación con Paz comienza a agobiarle cuando esta le entrega las llaves de su casa.
Gloria tiene problemas en casa y pasará la noche con Mateo en la zona MIR. Toño le pasa el caso de David, un señor con tumor cerebral que prefiere una cirugía agresiva que le dejará sin memoria porque quiere olvidar parte de su pasado. Cristina se encuentra bajo los efectos del tratamiento hormonal que le hace sentir cambios de ánimo repentinos. El paso de Sandra Salas por el hospital, su antigua adjunta y gran amiga la sumirá en una gran tristeza.