Florentino Fernández y Santiago Segura se convierten en Leticia Sabater y Rosalía: "¡La motomami y la salchipapa!"

  • Lara Álvarez anunciaba la llegada de un nuevo juego a 'Me resbala'

  • Florentino Fernández y Santiago Segura iban a ser los afortunados en estrenarlo

  • Para ello se han convertido en dos celebrities que tenían adivinar con preguntas que se pudieran responder con 'sí' o 'no'

Llegaba un nuevo juego a 'Me resbala'. Lara Álvarez anunciaba que los afortunados en estrenarlo iban a ser Flo y Santiago Segura. Se trataba de 'Se te ve el cartón', una prueba en la que cada uno de ellos iba a convertirse sin saberlo en otra persona. El ganador sería aquel que, gracias a preguntas que se pudieran contestar solo con 'sí' o 'no', descubriera antes en quién se había convertido.

Si acertaban, seguían preguntando, si fallaban, le pasaba el turno al contrario. Una vez Flo y Santiago ya se encontraban detrás de sus paneles, llegaba el momento de destaparlos. Flo era ni más ni menos que Leticia Sabater y Santiago lucía como Rosalía.

Comenzaba la ronda de preguntas. Flo preguntaba si era mujer, si era famosa y si era cantante, entre otras cosas. Santiago comenzaba preguntando, por ejemplo, si era artista, si su fama era internacional o si era una sexsymbol, algo que su compañero no ha dudado ni un momento: "Sí".

Santiago Segura lo da todo al ritmo de 'Despechá'

Lara Álvarez les daba entonces la primera pista: "Cuando acabas de ver un vídeo de ellas, te quedas diciendo 'no he entendido nada". Ambos hacían sus cábalas, pero el hecho de que Flo dijera a Santiago que no se imaginaba lo española que era, hacía que se llevara la prueba al bolsillo: "¡Soy Rosalía!". Con su acierto, 'Despechá' inundaba el plató y él lo interpretaba como si de la mismísima Rosalía se tratara.

Flo hacía pucheros porque también quería saber quién era él, así que Segura decidía ayudarle de inmediato y él daba con la tecla: "Eras bizca y lo que más resaltaría de ti son los abdominales". Uno de sus temas también sonaba en plató y Flo se convertía en ella dándolo todo: "¡La motomami y la salchipapa!".