Ayrton Senna

JUAN WÉS SOLÍS 06/03/2008 11:43

A los cuatro años, su padre le regaló un kart y desde entonces no dejó de pilotar. Su primera carrera la disputó a los 8. Fué ahí donde forjó su pilotaje. Participó en los campeonatos mundiales de esta modalidad entre 1978 y 1982, donde consiguió dos sub-campeonatos. Después paso a competir en la Fórmula Ford británica. Allí ya obtuvo su primer campeonato del mundo.

En 1984 debutó en la Fórmula 1 a los mandos de un Toleman. Precisamente con esta escudería conseguiría su primer podio. Corría el Gran Premio de Mónaco, caía una lluvia torrencial y Senna partía desde la posición decimotercera en la salida. La carrera apenas duró 31 vueltas, se interrumpió por la lluvia, pero Senna consiguió alcanzar la segunda posición. Ya en 1985 fichó por Lotus y logró ganar su primera carrera, en el circuito de Estoril, Portugal.

Ron Dennis le fichó para McLaren. De 1988 a 1993 logró sus mejores resultados. Junto a Alain Prost, el que sería su gran rival, formó una de las mejoras escuadras, aunque su rivalidad acabó en accidente y en divorcio. Nada más llegar a McLaren ganó su primer título tras imponerse en ocho carreras. Al año siguiente luchó con su compañero por el mundial. En el Gran Premio de Japón de 1989, Prost cerró el paso a Senna en la curva Casio mientras el brasileño lo adelantaba. Ambos chocaron, Prost quedó fuera de carrera y Senna fue segundo, pero quedó descalificado. El título fue para Prost.1

El francés se marchó a Ferrari por las continuas disputas y Senna gozó de un total protagonismo. Fueron sus mejores tiempos en la F1. Un año después de aquel mítico choque, y en el mismo escenario, Magic golpeó el coche de Prost, en lo que sería su venganza. Los dos quedaron fuera de la carrera, pero el título fue para Senna. Nigel Mansell llegó a McLaren, y junto a él, pelearon por el campeonato. Lo disputaron hasta el final, pero el brasileño se alzó con el tricampeonato en Suzuka, en la penultima prueba de la temporada. Ese mismo año regaló a su afición su primer triunfo en casa, en Interlagos.

Ya en 1994, con 3 Campeonatos del mundo a sus espaldas, fichó por Williams, y durante el Gran Premio de San Marino, en Imola, el 1 de Mayo de ese mismo año, perdería la vida a los mandos del FW16, a 300 km/h, cuando su coche se salió de pista en la vuelta 7, a la altura de Tamburello. Uno de los trozos del monoplaza que salió disparado en el accidente golpeó la cabeza del brasileño. Senna quedó inconsciente en el interior de su coche hasta que los médicos acudieron en su ayuda. Después de unas horas en coma en el Hospital de Maggiore de Bolonia, el piloto se fue para siempre, pero en ese mismo momento nació una de las leyendas más grandes de la historia de la Fórmula 1.