Enamorados... ¿en crisis?

AROA CANTO ESTEBAN 12/02/2009 00:00

Más de uno se las ingenia año tras año para sorprender a su pareja el Día de San Valentín. Todo para convertir a la otra persona en la más feliz, aunque sólo sea por un día. Sin embargo, la imaginación y la destreza para sorprender a alguien no marcan los límites. El bolsillo es quien, en tiempos de crisis, determina hasta dónde podemos permitirnos el celebrar el Día de San Valentín. Y en estos tiempos que corren, ¿sigue pudiendo más la 'cabeza que el corazón'?

"Más por el mismo precio"

Las actividades más "exclusivas" se siguen contratando, pero la crisis se ha colado en la 'fiesta' sin haber sido invitada. Carlos Fernández, Director de Comunicación de Paradores, reconoce que "la ocupación está siendo alta, sobre todo porque coincide con el fin de semana. El porcentaje ronda el 90 por ciento, todo un éxito, aunque en líneas generales, hemos percibido que los clientes han reservado un menor número de noches".

En su caso, han decidido apostar este San Valentín por la gastronomía, para invitar al consumidor "a disfrutar de la buena comida de los Paradores por un precio razonable". Aunque no han modificado sus precios ni tienen promociones más específicas, "hemos hecho hincapié en los pequeños detalles: flores en las habitaciones, botellas de cava... Ofreciendo al cliente más por el mismo precio".

Desde Rusticae (otra red de alojamientos), Pablo Ramón (Dto. Comunicación) asegura que los hábitos en los viajes han cambiado. "No para ahorrar. La gente que tiene dinero sigue gastándolo en ocio, pero han variado en favor del turismo nacional o de países vecinos como Portugal o Marruecos. El ambiente no está como para irse a la otra parte del mundo".

Sandra González, responsable de Viajes de Atrápalo, coincide en este aspecto. "En los últimos meses se ha empezado a notar un ligero cambio de tendencias en la contratación de este tipo de productos. Se buscan más viajes de último minuto, itinerarios más cercanos y en establecimientos más económicos". Una tónica que desentona en lo que a reservas de restaurantes se refiere. Massimo Tartarini, responsable de Restaurantes, asegura que "hemos experimentado un porcentaje ligeramente superior a las mismas fechas del año pasado". Además, reconocen, "a una cierta distancia, se siguen reservando actividades de aventuras, culturales y deportivas".

Las rosas nunca pasan de moda

Pablo, responsable de 'Regalo Original', asegura que el día de San Valentín "hacemos la misma facturación que en un mes". Aunque no han apostado por una oferta especial para paliar la crisis ni han aumentado su publicidad, reconoce que "en comparación con el año pasado, las ventas han descendido un 10%".

Los bombones, las flores y los objetos personalizados siguen siendo los más solicitados. "Son los productos que antes se nos acaban, junto con regalos más especiales como los desayunos a domicilio". "El cliente sigue gastando lo mismo (una media de 82 euros), aunque en cierto modo es como si hubiéramos bajado nuestra productividad puesto que hemos comprado el mismo volumen de rosas que el año pasado, una cantidad que aumentamos temporada tras temporada y que en esta ocasión no ha podido ser".

Lo que está claro es que el amor no tiene fronteras, y si para ello hay que apretarse un poco más el cinturón, así lo hacemos. Pero sin descuidar la calidad. Porque, como se suele decir, a nadie le amarga 'un dulce'.