La pareja se conoció en el humilde barrio de Malmoe, situado en la ciudad de Rosengard (Suecia), donde ambos vivían. Desde entonces la pareja no se ha separado.
Helena estudió Ciencias Económicas mientras trabajaba de camarera y modelo, pero entró en una tienda de ropa como encargada y su ambición hizo el resto. Así ha completado un curriculum que incluye ser directora de Márketing de la multinacional Swatch Group Nordic y de la compañía aérea FlyMe.
La mujer de Ibrahimovic se aleja del estereotipo de mujeres que suele rodear a los futbolistas, junto a Zlatan forman una de las parejas más estables y discretas del panorama futbolístico. No están casados pero tampoco lo necesitan y forman una sólida familia junto a sus hijos Maximilian, de 3 años, y Vincent, de uno.
Durante su etapa en Italia, Ibrahimovic se cansó de los constantes rumores que le perseguían y declaró: "Helena es mi novia, lo aclaro para poner fin a los rumores, pero no diré nada más de mi vida privada". La última vez que hablo con los medios de su mujer fue a la televisión del Inter, antes de dejar el club, "mi mujer es mi primer y último amor verdadero", fueron sus palabras.