Finalmente, la sangre no llegó al río. Fox afirmó que, en realidad, no era necesario: "Estaba dispuesta a investigar sobre la prostitución pero la verdad es que no me hizo falta", explica la protagonista de Transformers.
"El tipo de prostitución que existía antes no tiene nada que ver con el de ahora. Era una forma bastante común de sobrevivir para una mujer", reflexiona en voz alta Fox. Sobre su personaje, Jonah, Megan explica que "no enseña demasiada" carne y piel, por lo que está bastante "contenta".
"Si hubiera habido más escenas gráficas probablemente las hubiera hecho, pero la única escena de sexo que aparece en la película es entre Jonah y su amante", explica la guapa actriz.
En estos momentos, Megan se encuentra inmersa en el rodaje de su película Passion Play y todavía tendremos que esperar hasta el próximo mes de junio, cuando se estrene Johan Hex en Estados Unidos, para poder ver a la impresionante actriz en la gran pantalla.