Nilmar firma una victoria pasada por agua

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 17/09/2009 21:04

El conjunto amarillo se presentó con varias novedades en el equipo titular donde destacaron las ausencias de Rossi, Cazorla y Godín, además del lesionado Marcos Senna en el centro del campo. Valverde apostó por Jonathan Pereira y el brasileño Nilmar para la punta del ataque. Sin embargo, la pareja mostró falta de conexión y se fue apagando a medida que avanzó el partido.

El Villarreal tuvo el dominio del balón durante la primera mitad de forma infructuosa. Un primer tiempo marcado por la lluvia que hizo que cada vez el balón fuese más rápido. Los hombres de Ernesto Valverde hicieron circular bien el esférico, pero se mostraron excesivamente planos y sin profundidad.

El Levski estuvo cómodo y eso que en el primer cuarto de hora, el Villarreal tiró a puerta hasta en cuatro ocasiones. Los búlgaros ni se inmutaron. El equipo se Sofía se mostró como un bloque frío, ordenado y con mucha disciplina a la hora de arropar a su portero.

Los visitantes no miraron la portería de Diego López hasta el minuto 42 cuando en una doble jugada a punto estuvieron de marcar si Gonzalo Rodríguez no hubiera desvía un balón que iba a puerta.

Tras el descanso, el partido siguió por los mismos derroteros, el Villarreal en posesión del balón y el Levski en posición de defensa. Valverde le quiso cambiar el ritmo al encuentro y retiró a Bruno para dar entrada a Ibagaza con el objetivo de dotar de más creación al centro del campo.

Nada más hacer el cambio, una pared en la frontal del área dejó a Nilmar frente al portero, el brasileño lo regateó y cuando ya se cantaba el gol en la grada, un defensa del conjunto búlgaro lo sacó prácticamente sobre la línea. La misma suerte corrió Eguren cuando remató en boca de gol y el balón tampoco entró pasada la hora de partido.

Los cambios surtieron efecto y a los cinco minutos de salir Rossi, el italiano cedió un balón desde la izquierda para que Nilmar rematara a gol desde dentro del área pequeña. El Levski aguantó 71 minutos con la portería a cero, y casi acaba por desquiciar a los locales.

El tanto le dio una dosis de confianza y tranquilidad a los amarillos, mientras que a su rival le sirvió para dar un pasito al frente que no fue suficiente para lograr el empate. El Villarreal arranca con victoria en Europa después de dos empates consecutivos en la Liga.