"Durante el Gran Premio de Singapur de 2008, por entonces mi director Flavio Briatore y el director técnico del mismo equipo, Pat Symonds, me propusieron provocar un accidente para favorecer deliberadamente a Renault en la carrera.
Por eso choqué mi coche contra el muro entre las vueltas 13 y 14", aseguró el brasileño. "Me hicieron la propuesta poco antes de que empezara la carrera", añadió el piloto brasileño, actualmente sin equipo después de que la escudería francesa decidiera prescindir de sus servicios. No en vano, reconoce que detrás de todo el incidente estaba su futura renovación con el equipo.
Las informaciones señalan que fue el padre de Piquet el que se dirigió a la FIA el pasado 26 de julio con motivo del Gran Premio de Hungría, el último que correría su hijo con el R-29, y que cuatro días después, éste presentó un comunicado en las oficinas del organismo dirigido por Max Mosley, que inmediatamente comenzó a investigar el asunto.
La FIA indicó el pasado lunes que la escudería Renault debería presentarse el próximo 21 de septiembre para prestar declaración por este asunto. En el caso de ser encontrado culpable, lo más probable es que la escudería francesa fuese expulsada del Mundial.