Lily Allen ha sido una de las estrellas del festival de música australiano Big Day Out Festival. Durante su actuación, ante cientos de fans, dio que hablar debido a que llevaba una especie de poncho plateado que dejaba ver su sujetador en varias ocasiones. Pero la nota la dio cuando bajó del escenario. Se abrigó con una manta y fue recogida por sus acompañantes para llevarla al coche. Pero en el trayecto entre el escenario y el coche, la cantante británica, de 24 años, cayó al suelo repentinamente. Descalza, con el maquillaje corrido y el pelo despeinado, se fue tambaleando por una carretera hasta que finalmente se desvaneció. No debió hacerse mucho daño a juzgar por las risas de sus acompañantes, que rápidamente la levantaron y continuaron su camino. El diario británico Daily Mail ofrece dos teorías acerca del estado de Lily Allen: o estaba afectada por el calor del verano australiano o había bebido demasiado. Allen, acostumbrada a dar la nota con sus polémicas declaraciones, es una de las grandes estrellas del momento en Reino Unido y parte como favorita para los Brit Awards.
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