Gary McKinnon, que ha estado luchando contra la extradición durante siete años, se enfrentaba a hasta 60 años en una prisión estadounidense si hubiera sido hallado culpable de lo que un fiscal del país norteamericano llamó "el mayor pirateo informático militar de todos los tiempos".
"He concluido que la extradición del señor McKinnon originaría un riesgo tal de que acabe con su vida que la decisión de extraditar sería incompatible con los derechos humanos del señor McKinnon", ha comentado May al parlamento. "Por consiguiente he retirado la orden de extradición contra el señor McKinnon", ha agregado.
McKinnon, de 46 años, admitió que 'hackeó' las computadoras del Pentágono y de la Nasa bajo el seudónimo de "Solo", pero dijo que sólo había estado buscando evidencia oculta sobre ovnis.
Funcionarios estadounidenses dijeron que el administrador de sistemas informáticos había accedido a 97 computadoras de la NASA y de la milicia entre el 2001 y el 2002, desactivando sistemas navales claves y provocando más de 700.000 dólares en daños.
McKinnon, que tiene el Síndrome de Asperger, ha estado enfrentando la posibilidad de ser extraditado desde que la policía británica lo arrestó en el 2005.