La recuperación de la capa de ozono, un cinturón de gas que envuelve a la Tierra protegiéndonos de la dañina radiación ultravioleta B emitida por el sol, podría retrasarse más de 30 años al haber aumentado las emisiones de diclorometano, también conocido como cloruro de metileno.
Hasta ahora, se desconocía su efecto sobre la capa estratosférica. No obstante, se ha sabido que este gas, cuya vida media es de unos cinco meses, libera cloro, que destruye el ozono si llega a alcanzarlo, según publica metro.co.uk.
El producto químico es utilizado como disolvente industrial y diluyente de pintura. No obstante, también es empleado en el proceso de descafeinado del café. Los granos entran en contacto con el diclorometano para eliminar la cafeína mediante un proceso de vaporización.
A pesar de ello, no existen indicios de que esto sea perjudicial para el consumo humano.