Tras estar "al borde de la muerte", presenta un dispositivo revolucionario para la salud

Informativos Telecinco 21/10/2017 20:08

“¿Por qué dejar a la gente sufrir cuando podemos encontrar qué es lo que realmente está pasándole?” Con esa pregunta se presentó Mary Lou Jepsen, extrabajadora de Facebook, en la conferencia sobre salud ‘Rock Helath Summit’ en San Francisco, quien está trabajando en una tecnología que permitiría “mirar en el interior de tu cuerpo, –de cualquier parte del cuerpo–, en alta resolución” a través de un sistema cómodo y económico, en comparación con la tradicional resonancia magnética.

Según explica Business Insider, la idea de embarcarse en un proyecto tan ambicioso como útil y revolucionario en el ámbito de la salud y el bienestar nace precisamente de su terrible experiencia, llegando a estar al borde de la muerte. “Casi muero. Literalmente fui a casa a morir, porque no sabía que necesitaba una resonancia magnética”, explica.

Y es que Jepsen, que no tenía ni la más remota idea de por qué sufría continuos dolores de cabeza y tenía signos de debilitamiento, descubrió, cuando estaba en la veintena de edad, que tenía un tumor cerebral.

Hoy, 20 años después de haberse sometido a la prueba para obtener la imagen por resonancia magnética, subraya que el proceso sigue siendo terriblemente costoso y genera numerosos temores en multitud de personas, ante un proceso que supone introducirse en un espacio reducido donde no te puedes mover y donde has de permanecer durante 30 minutos.

Concretamente, precisa Business Insider, las máquinas que llevan a cabo este tipo de pruebas cuestan unos 3 millones de dólares a los hospitales, y unos 2.600 a los consumidores por cada test efectuado, esto es, más de dos millones y medio y más de 2.200 euros respectivamente.

Así, la nueva tecnología que propone Jepsen, haría lo mismo pero empleando en lugar de la imagen magnética, luz cercana al infrarrojo; una luz que podría penetrar en el interior de las células y distinguir entre la sangre que ha sido oxigenada y fluye desde el corazón a la sangre que no ha sido oxigenada, por “la diferencia de color”.

Con ello, dice, “obtienen una resolución un billón de veces mayor que con una imagen por resonancia magnética”.

No obstante, todavía no se sabe cómo se llamara el dispositivo y cuán lejos está de su completo desarrollodo, si bien Jepsen confía en que pueda emplearse para multitud de aplicaciones y sirva para detectar enfermedades en el interior del cerebro y mejorar en el entendimiento de enfermedades mentales como la depresión.