"Si no nos lo piden, no estamos en eso", ha explicado a Europa Press el presidente de la institución, Manuel Campo Vidal, al ser preguntado sobre si ha habido algún tipo de comunicación con las formaciones políticas en este sentido.
Precisamente, Campo Vidal fue el periodista encargado de moderar el debate entre el presidente del Gobierno y candidato del Partido Popular, Mariano Rajoy, y el líder de la oposición y candidato por el PSOE, Pedro Sánchez, el 14 de diciembre de 2015, seis días antes de los comicios generales del 20D.
Este 'cara a cara', que organizó la Academia de la Televisión y que siguieron in situ más de 300 profesionales de 50 medios nacionales e internacionales, generó cerca de 1,7 millones de comentarios en Twitter, llegando a alcanzar picos de conversación de hasta 9.054 'tuit' por minuto, y un total de 9.728.000 espectadores lo siguieron de media.
Tras la celebración del citado 'cara a cara', Campo Vidal confesó que había sido el debate "más difícil" que ha tenido que moderar en su trayectoria profesional. "Fue realmente muy complicado", dijo el presidente de la Academia de Televisión sobre el encuentro, en el que Pedro Sánchez acusó a Mariano Rajoy de no ser "una persona decente" por los casos de corrupción que han afectado a su partido.
En todo caso, hay que recordar que para que la institución organice un debate electoral se deben cumplir ciertas condiciones como el deseo de los líderes políticos en participar, que haya más de una cadena de televisión dispuesta a retransmitirlo y que se cuente con la autorización de la Junta Electoral Central.
De esta forma, si los partidos políticos muestran su disposición de participar en un encuentro de estas características, la Academia ofrece, como ya hizo en los años 2008, 2011 y 2015, una señal institucional del debate a todos los medios de televisión, radio, prensa e Internet, tanto nacionales como internacionales que estén interesados.
El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha afirmado este miércoles 4 de mayo que "a nadie le apetecen debates" en campaña electoral porque exigen "un gran esfuerzo" y no son "algo cómodo", pero ha añadido que no se trata de que a un candidato le apetezca o no, sino "de cumplir estándares democráticos razonables".