Así, el informe económico de las Telecomunicaciones y del Sector Audiovisual recoge que, si se incluyen las subvenciones que percibieron los operadores por parte de las distintas administraciones públicas, el sector ingresó un total de 5.591 millones de euros, un 5,3% menos.
Los ingresos de las televisiones de pago superaron a los de las televisiones en abierto, que ingresaron 1.579,7 millones de euros, un 5,2% menos con respecto a 2012, la cifra más baja desde el año 2000. En 2013, los servicios de televisión de pago registraron 1.715,2 millones de euros, lo que supuso un 1,8% menos respecto al ejercicio anterior.
Además, a finales de 2013 se registraron un total de 3,9 millones de abonados a servicios de televisión de pago, (excluyendo los servicios de televisión a través de terminales móviles), lo que supone una pérdida de 237.934 abonados con respecto al cierre de 2012, un 5,7% menos.
Durante el año, más del 50% de los abonados a la televisión de pago contrataron el servicio de televisión con algún otro servicio de telecomunicaciones de forma empaquetada.