Un oficial de mantenimiento del Metro de Madrid encontró ayer una cartera sustraida con un cheque nominativo de 2 millones de dólares en su interior, además de varias tarjetas de crédito y el carnet de conducir de un ciudadano californiano. Por lo general los ladrones se deshacen de las carteras tirándolas a las vías pero en esta ocasión no sucedió lo mismo.
La cartera se quedó atascada entre las puertas de uno de los vagones, por lo que no cerraba bien. El tren, que circulaba por la línea 5, estaba en la estación de Diego de León. Por protocolo, se retiró a las cocheras de Canillejas para su revisión.
Una vez allí el operario detectó el problema, descubriendo el "tesoro perdido". El trabajador lo puso en conocimiento de sus superiores y éstos después contactaron con las autoridades, los cuáles se quedaron con la cartera a la espera de que el dueño la "eche de menos".