Según los documentos legales a los que ha tenido acceso la prensa británica, el exmatrimonio compartirán la custodia de sus hijos y al tratarse de una separación, no un divorcio, la traicionada esposa podrá reclamar algunos beneficios fiscales y la cuota de asistencia sanitaria. En los papeles presentados por Meeks no se han podido determinar todavía la naturaleza y el alcance de sus activos y sus pasivos para poder llevar a cabo la separación de bienes.
"Mejor ser sancionado con la verdad que ser besado con una mentira", escribió Melissa el pasado 14 de julio un mensaje en su cuenta de Instagram, después de que se publicaran las fotos del padre de su hijo en el restaurante Catch de Los Ángeles con su nueva pareja. "Sé que se necesitan dos para bailar un tango, pero ella sabía que era un hombre casado. Para mí, eso es imperdonable", decía la exmujer. "Mi mundo entero se ha roto. ¿Qué le digo a nuestros hijos? Mi corazón está roto", añadió. Jeremy y Melissa comparten a su hijo, Jeremy Jr., de siete años, mientras que la madre aporta dos hijos más de relaciones anteriores: Robert (11) y una hija de 16 años.