El rodaje de la película, en 2001, no estuvo exento de incidentes. Después de lesionarse al caer de unas escaleras durante una grabación, Kidman se rompió la costilla al colocarse un corsé de bailarina porque lo quería lo más ajustado posible.
“Me lesioné bailando en tacones a las tres de la mañana, me caí de las escaleras y se rompió mi costilla intentando entrar en un corsé”, ha confesado ahora la actriz.
“Yo quería tener una cintura muy pequeña, de 46cm y le decía a Vivian Leigh: más apretado, más apretado”, ha comentado la actriz. “Moulin Rouge fue muy duro para mí”, ha confesado.