"Fue un partido bastante bueno para nosotros, con buenas sensaciones en ataque, siempre elegimos un buen tiro y tuvimos opciones de buenos lanzamientos. Hay que olvidarse de esta última canasta que nos metió Perperoglou y ya de cara a afrontar un partido similar o incluso más duro para el viernes", aseguró en declaraciones ante los medios.
En ese aspecto, señaló que las historias están para "romperlas", algo que desde las filas blancas ya han vivido al haber disputado "muchísimas" finales en las que siempre ha habido "sorpresas". "Esperemos que esta sea una de ellas", agregó en relación a la remontada que el equipo necesita para superar al FC Barcelona Lassa.
"Esto es lo que tiene el deporte, unas veces cara y otras cruz y este año estamos teniendo muchísima mala suerte en las últimas jugadas. El año pasado tuvimos todo de cara y este año nos está costando más. El equipo ha hecho unas grandísimas series de 'play-off' y vamos a por el partido de mañana", advirtió.
No obstante, restó importancia a la responsabilidad de los que "tienen el poder de pitar", a los que "hay que dejar" ante posibles fallos arbitrales, asegurando que no cree que vayan a favorecer a ningún equipo. "Igual que yo me voy a equivocar lanzando un triple, ellos pueden hacerlo al tomar decisiones. Respetamos mucho a los árbitros españoles, que son de los mejores de Europa", comentó.
Finalmente, recordó que la idea era la de "ganar al menos un partido", algo que casi consiguen este miércoles pero que todavía no es imposible y pueden conseguirlo este viernes siempre y cuando sean "más agresivos" en defensa.
"Espero que ellos no jueguen tan a gusto como hicieron ayer. Ofensivamente somos uno de los mejores ataques de liga y los puntos vienen, pero defendiendo no podemos permitir que nos hagan 100 puntos", concluyó.