Según explicó FIBA a través de un comunicado, este martes se celebró una audiencia en la que la corte alemana "escuchó todos los argumentos de FIBA Europa", organismo que tuvo "su primera oportunidad de explicar su postura ante el tribunal".
Se trata del último capítulo de la guerra que mantienen desde hace meses FIBA y Euroliga (ECA). El pasado 4 de junio, el Tribunal de Múnich prohibió a FIBA y FIBA Europa sancionar a los clubes con no poder participar en competiciones organizadas por ECA y dictaminó que cualquier selección que haya logrado la clasificación para las competiciones organizadas por la FIBA y FIBA Europa no puede ser excluida.
De hecho, el juez germano especificó que se sancionará con hasta 250.000 euros o prisión de hasta seis meses de cárcel cada infracción, que cumplirían el director gerente en el caso de FIBA Europa y en el secretario general en el caso de FIBA.
En principio, este fallo permitió que todos los clubes europeos sigan la planificación de la temporada 2016-17 incluyendo su presupuesto, contratos de patrocinio, contratos de los jugadores y todos los demás preparativos que habían estado afectados.