Claves básicas para pasarte al snowboard

Luis Murillo (@lmurilloarias) 29/01/2016 09:36

Si quieres estar a la última, el snowboard es tu deporte de invierno. ¡No lo dudes! Ya no es necesario que te hagas un ultratrail por la nieve o escales el Everest sin oxígeno basta con comprarte una tabla de snow, el material pertinente y aplicar ciertos consejos para comenzar a descender por la ladera. Ya hay casi tantos practicantes de este deporte como del esquí. Dentro de la organización tribal que hay en el manto blanco, el snowboard está directamente vinculado a los que son más modernos. Vamos, que si quieres ser un hipster de la nieve, tienes que ser snowboarder. Si eres esquiador, eres un clásico trasnochado. Si realmente quieres estar en la onda, ¿a qué esperas para ser rider?

En El Tiempo Hoy te facilitamos unas claves para iniciarte en este deporte. Para el que está acostumbrado a esquiar, aprender a hacer ‘snow’ no será tan complicado pues sabrá controlar la gravedad, entiende la nieve y, sobre todo, los cantos de la tabla. En este caso, el balanceo del pie, en vez de ir de lado a lado del esquí, ahora irá del talón a la punta.

- Hay que seleccionar muy cuidadosamente el calzado. La bota se debe adaptar y adherir al milímetro a la tabla para ser capaces de dirigirla bien.

- Elegir bien tu pie favorito. A los diestros se les denomina ‘goofys’ y colocan la pierna izquierda detrás. A los zurdos se les llama ‘regular’ y, claro está, colocan atrás el pie derecho. Para averiguar si eres uno u otro te proponemos una prueba sencilla: permanece quieto con las piernas alineadas, que un compañero te empuje por detrás; el pie que eliges para mantener el equilibrio y que moverás hacia delante será vuestro preferido.

- Adaptarte lo antes posible al equipo, sobre todo a la tabla. Al principio puedes remar como si estuvieras sobre un skate. Impúlsate con el pie de atrás a la vez que aguantas la tabla recta. Cuando cojas la velocidad y dirección adecuada, ya puedes ubicar tu pie trasero en la tabla. Es una operación que debes repetir en varias ocasiones para acostumbrarte.

- Encontrar la posición adecuada. No olvides nunca que estar completamente de pie y estirado no es bueno porque acabarás en el suelo en un santiamén. La mejor posición es con las piernas semiflexionadas. De esta manera, ejercerán de amortiguadores y te harán mantener el equilibrio. Se le suele llamar la posición del guerrero puesto que se asemeja a la de un atleta que va a iniciar una carrera o un salto o el guerrero que está agazapado a punto de atacar. Los giros en la dirección se hacen con los hombros, que será tú timón. Siempre manda la mano delantera.

- Acelerar y a frenar sobre la tabla. Has de aprender a controlar el ángulo de inclinación y la gravedad de los cantos de la tabla. Cuando estás parado, te será imposible mantenerte de pie. Así que si te paras, siéntate.

- Comienza a deslizar con el objeto de mantener el equilibrio. Mueve suavemente los tobillos cambiando la fuerza contra la nieve. Así vas acelerando y frenando. Si imprimes mucha fuerza, verás cómo al final terminas totalmente parado. Juega con las fuerzas sobre el talón y el pie de delante para ver cómo vas yendo más rápido o más lento.

- Cuida la seguridad con el equipo apropiado. Hay numerosos peligros que tienen que ver con los cambios en las condiciones meteorológicas, las condiciones de la nieve ya existente, si hay zonas peladas o sin nieve, las rocas, los árboles, posibles choques contra objetos naturales, hechos por el hombre o, incluso, otros snowboarders o esquiadores, etc.

- Selecciona una tabla polivalente y que no sea demasiado larga. Has de saber que a más longitud, mayor inestabilidad. Es fundamental llevar unas buenas botas, fijaciones, gafas de sol o de ventisca, cascos, guantes y muñequeras.

- Ir equipado con prendas de abrigo. Llevar ropa interior térmica, calcetines igualmente térmicos, capas intermedias, pantalones de snowboard, anorak y bragas para el cuello.

- No imprescindibles, pero sí complementarios, son los calentadores de manos y de botas, walkie-talkies, crema solar, bálsamo para los labios, agua y comida.

- Si te decides por practicarlo, nunca lo hagas solo. Alguien tiene que pedir ayuda en caso de que sufras una caída importante.

Modalidades olímpicas de snowboard

Ya dispones de la teoría, ahora sólo te queda ponerla en práctica. Y si le coges el gustillo y comienzas a convertirte en un experto, quizás quieras afrontar aventuras mayores, como, quién sabe, acudir a unos JJOO de invierno. En la actualidad existen cinco disciplinas olímpicas en el snowboard tanto en categoría masculina como femenina.

Snowboard cross. Participan cuatro competidores a la vez que descienden por una pista llena de saltos, curvas y obstáculos. En la primera bajada lo hacen de forma individual y se clasifican los 32 mejores tiempos. Después llegan las eliminatorias en donde irán compitiendo de cuatro en cuatro eliminándose hasta conocer al ganador final.

Eslalon Gigante Paralelo. Al igual que en la modalidad anterior, los competidores descienden primero de manera individual clasificándose los 32 mejores tiempos para las eliminatorias pero una vez llegadas estas los riders saldrán de dos en dos teniendo que sortear distintas puertas y avanzando rondas hasta llegar a la final. La modalidad olímpica es la de Eslálon gigante y en la que aún se utilizan las botas rígidas que comenzaron a utilizarse en los orígenes del Snowboard.

Eslalon Paralelo. Permite a los riders afrontar el recorrido en paralelo, con dos competidores bajando a la vez. Primero se disputa una manga de clasificación tras la que los 16 mejores se enlazan por parejas comenzando así las eliminatorias, pasando cada ganador a la ronda siguiente hasta proclamarse el vencedor final.

Half-pipe. Se practica dentro de un tobogán o medio tubo (half-pipe) con forma de “U” con paredes verticales y que se localiza en una pendiente de desnivel medio. Los riders tratan de realizar todas las acrobacias posibles saltando más allá de los bordes de éste. Es una disciplina muy difícil y en la que se suelen utilizar tablas y fijaciones muy duras que permitan un control total. Se trata de una de las modalidades más espectaculares de los deportes de invierno.

Slopestyle. Es la disciplina del freestyle que combina todos los elementos propios de un snowpark en una sola prueba. En un circuito slopestyle se encuentran diferentes módulos como saltos, barandillas y cajones. El límite lo pone la imaginación de los organizadores del evento. El rider puede tomar diferentes caminos opcionales a lo largo de la bajada. La valoración de los jueces se hace en función de la dificultad y calidad de ejecución de los trucos realizados durante el circuito.