"Ha sido un gran fin de semana. Todo ha salido a la perfección, de principio a fin. También en la carrera porque en el coche sentía que cualquier cosa que quisiera hacer me iba a salir, no había posibilidad de cometer un error. Ha sido muy especial para mí, un resultado increíble, primera vez aquí, y un auténtico éxito. La pista es emocionante y he escuchado que ha habido mucho adelantamiento", declaró en rueda de prensa.
"Sinceramente, hoy sólo quiero disfrutar esta victoria porque es para lo que estoy aquí. Quería ganar en Bakú y es lo que ha ocurrido, no puedo esperar para ver a mi gente", añadió, el alemán, que devuelve el golpe de Canadá a Hamilton y vuelve a mandar en el Mundial con autoridad y 24 puntos de renta.
"Estoy convencido de que el hecho de tener un poco de experiencia ayuda en este caso. Todos somos ahora más experimentados, sabemos evitar los incidentes y también hemos aprendido mucho de lo que pasaba en la GP2 porque éramos espectadores y era un caos. De ahí cogimos varias cosas", explicó.
El actual líder del campeonato reconoció no estar "realmente preocupado" por una posible salida del 'safety car' que hubiese cambiado el devenir de la carrera. "No estaba realmente preocupado pero no quería que ocurriese. Estaba viendo muchas batallas delante de mí con humo saliendo de las ruedas y coches yendo de un lado para otro y estaba pensado para mí 'vamos chicos, no hagáis que salga el 'safety car' ahora", subrayó.