"No esperábamos este desastre. Ha sido el mayor varapalo en mi vida como futbolista y entrenador, y para los jugadores supongo que también. Vamos a pensar, siendo optimistas, que hemos perdido tres puntos y no que hemos encajado nueve goles, que ha sido bochornoso", declaró en la rueda de prensa posterior al duelo.
En este sentido, el técnico toledano ha afirmado que ha sido "un varapalo muy fuerte". "Hay que levantarse lo antes posible antes del miércoles, no nos queda otra. Para nosotros este partido ya ha pasado y ya es historia. La culpa es solo mía", reconoció.
El preparador del cuadro andaluz afirmó que eran conscientes de la dificultad de enfrentarse a los de Carlo Ancelotti, pero que no han estado "a la altura". "Sabíamos que íbamos a tener contragolpes y hemos pecado en eso. El Real Madrid ha estado a una buena altura y nosotros no lo hemos estado", manifestó.
Por otra parte, reconoció que los jugadores están "muy dolidos". "Si no lo estuvieran, sería raro. Hoy no estamos a la altura de este escudo. Vamos a intentar borrar esta imagen y vamos a intentar levantarnos. Mañana es otro día, sabemos que no nos podemos relajar. Ahora todos tenemos el deber y la obligación de levantar la cabeza", aseveró.
Por último, el técnico del conjunto nazarí explicó que está siendo una "temporada atípica", por lo que la permanencia podría rondar los "36 o 37 puntos", lejos todavía de los 23 del Granada.