La entidad que rige el fútbol sudamericano anunció una serie de medidas de gracia por su centenario, que también benefició al club Rosario Central argentino.
Boca fue sancionado en mayo del 2015 con cuatro partidos de local a puertas cerrada y cuatro como visitante sin público, tras el escándalo desatado en el choque como local ante su clásico rival en los octavos de final de la Libertadores.
Por su parte, Rosario Central había sido penalizado con un partido sin público por un incidente causado por sus aficionados durante la Copa Sudamericana y ahora la sanción queda sin efecto.
"Las medidas de gracia fueron tomadas por única y exclusiva vez y con el parecer positivo de la Comisión de Asuntos Legales y el respaldo mayoritario de los miembros del Comité Ejecutivo (...) se aplicarán de manera automática y sin más trámites", dijo el documento divulgado en la página oficial de la Conmebol.
Las medidas también benefician a jugadores con una reducción a la mitad de las sanciones recibidas. La resolución excluye a quienes fueron suspendidos por casos de dopaje, agresiones físicas a árbitros o por racismo y discriminación, destacó la Conmebol.