En un escenario bastante complicado, Bojan es ahora mismo jugador del FC Barcelona, aunque el club blaugrana deberá pagar de una u otra forma, a Roma o Milan, para que la próxima temporada pueda jugar en el Camp Nou.
Como mínimo, el Barça deberá pagar a la Roma 13 millones de euros este verano para recuperarlo de forma obligatoria como se pactó en el momento de la cesión por dos años, operación por la que el club catalán recibió 12 millones de euros. Si la Roma lo quiere, deberá abonar 28 millones de euros adicionales, si no, el Barça pagará el millón citado.
Por contra, si es el Milan quien quiere hacerse con los servicios del delantero catalán, deberá abonar la cifra pactada con el Barça, desconocida, a las arcas blaugranas. Si el Barça quiere evitar que el jugador se vaya al Milan, deberá pagar una cláusula de bloqueo cuya cifra tampoco ha desvelado Bartomeu.
Así, sea cual sea la decisión final de Milan y Roma, el Barcelona deberá pagar por volver a contar con un Bojan Krkic que se fue a la capital italiana en busca de minutos en el equipo de Luis Enrique, aunque finalmente no gozó de la confianza del asturiano y, esta temporada, no contaba para el nuevo técnico, Zdenek Zeman, quien aceptó su cesión al Milan.