Además de esa precaución, las habitaciones de la delegación brasileña en la Villa Olímpica estarán protegidas con telas contra mosquitos y equipadas con aire acondicionado. En este sentido, se le pedirá a los atletas que usen repelente para evitar el virus transmitido por el mosquito Aedes aegypti.
"Conversamos con el abastecedor de uniformes para aumentar una o dos camisetas de manga larga para que los atletas tengan más opciones durante los 30 días que van a estar en Río", dijo el director ejecutivo del COB, Marcus Vinicius Freire, en entrevista con Reuters.
Según el COB, aún no está definida la cantidad de material que se entregará a los atletas. La empresa que fabrica los uniformes de la delegación brasileña dijo a través de una agencia de prensa que no realizará comentarios sobre el tema.
La propagación del virus, relacionado con cientos de casos de bebés nacidos con malformaciones, ha sido motivo de preocupación entre los atletas extranjeros. Las autoridades dicen que como los Juegos se disputarán en invierno las condiciones ambientales no serán las viables para el mosquito que transmite el virus.
Unos 400 atletas brasileños competirán en Río, los primeros Juegos de América del Sur en la historia.