"Si Geraint está volando y yo estoy sufriendo, entonces definitivamente le apoyaré. Estaría feliz de jugar ese papel si eso significara que podríamos tener un campeón olímpico", declaró Froome durante el 'stage' de su equipo, el Sky, en Mallorca.
Froome prefiere centrarse en la preparación para el que será su tercera participación en el Tour de Francia antes de fijar su mirada en el intento de conseguir dos medallas de oros en las pruebas olímpicas por las calles de Río de Janeiro.
Thomas, con el que mantiene una estrecha relación, ha comenzado la temporada proclamándose campeón de la Vuelta a Algarve y se espera que el británico, que trabaja sin descanso, sea uno de los principales candidatos para la prueba de carretera en Río bajo los colores británicos.
"La clave de todo esto es la comunicación. Especialmente con Geraint. Hemos estado viajando juntos durante más de 10 años", dijo Froome. "En los Juegos Olímpicos será una disputa muy honesta", aseguró.
El corredor de origen keniata, de 30 años, ya ha realizado el reconocimiento para unas pruebas de ciclismo que cubrirán 256,4 kilómetros con importantes desniveles.