En este sentido, la junta directiva ha propuesto incrementar los dividendos en un 15%, hasta los 3,75 euros por acción, lo que se traduce en 750 millones de euros y una cuota de distribución del 27,5%.
Por otro lado, el flujo libre de caja de la empresa tecnológica en 2015 antes de adquisiciones ha crecido hasta los 2.700 millones de euros, más de 500 millones de euros en comparación con el año anterior.
A su vez, la cifra de negocio ha aumentado en más de 4.700 millones de euros, en torno al 14%, hasta alcanzar los 39.200 millones de euros y el capital propio ha experimentado un incremento hasta los 13.200 millones de euros, como base para un nuevo modelo comercial digital.
La reserva de liquidez de la compañía ha disminuido en 2.000 millones de euros, hasta los 3.200 millones. Según ha explicado el director financiero de Continental, Wolfgang Schäfer, esta disminución se debe fundamentalmente a las adquisiciones de Veyance Technologies y Elektrobit Automotive, al reembolso anticipado a mediados de septiembre de las obligaciones emitidas en dólares estadounidenses y al reembolso del crédito sindicado.
En 2015, la cuota de inversión fue del 5,6%. El gasto en I+D aumentó un 14,6% en comparación con el año precedente, unos 2.400 millones de euros.
La evolución del negocio puede verse reflejada en el aumento del número de trabajadores, según explican desde la empresa tecnológica. A finales de 2015 la empresa contaba con alrededor de 208.000 empleados, unos 19.000 empleados más que un año antes.
CRECIMIENTO DEL 5% EN 2016
Para el ejercicio 2016 Continental espera tener un crecimiento orgánico rentable de alrededor del 5%, cifra similar a la de 2015. "El comienzo de este ejercicio ha confirmado las expectativas para 2016 a pesar del complicado entorno de mercado", ha explicado el presidente de la junta directiva de Continental, el Dr. Elmar Degenhart.
Así, la compañía prevé un aumento moderado de la producción de vehículos del 1,5% a escala internacional, unos 90 millones de unidades, según ha apuntado Schäfer. La debilidad de los mercados ruso y brasileño se vería de nuevo contrarrestada con creces por el crecimiento del mercado del automóvil en Europa y en China.