En declaraciones a los medios, Carnero ha afirmado que "no tendría ninguna lógica" que un modelo como este no se fabricara en Martorell, ya que es del mismo segmento que el Ibiza y, por tanto, se podría ensamblar en la misma línea.
Aunque el grupo alemán no ha anunciado todavía que este segundo modelo todocamino se vaya a fabricar, Carnero ha dado por hecho que se hará, y el mismo presidente de Seat, Luca de Meo, ha afirmado que "se podría aprovechar la plataforma del Ibiza para hacer el SUV pequeño", al ser preguntado en rueda de prensa por si ya se ha decidido dónde se ensamblará.
DEL Q3 AL A1
Carnero ha alertado de que el cambio del Audi Q3 por el Audi A1 a partir de 2018 en Martorell puede suponer un excedente de empleo si no hay otra adjudicación, y ha afirmado que no sería suficiente la fabricación del SUV pequeño, porque ha considerado que no supondría suficiente volumen.
Ha señalado que para compensar la pérdida de las 130.000 unidades del Q3 que se fabrican actualmente en Martorell deberían producirse 220.000 del A1, lo que ha afirmado que es imposible, porque como máximo se ensamblarán 160.000.
El presidente del comité de empresa --que ha asistido al salón de Ginebra acompañado del secretario general de CC.OO. en Seat, Rafael Guerrero-- se ha mostrado confiado de que el nuevo presidente de Seat "va a luchar por ese modelo adicional".