No las tuvo consigo el número tres del mundo, desconocido, que vio cómo una vez más 'la versión Federer' del suizo Wawrinka fulminaba con su derecha y su saque sobre la Arthur Ase de Nueva York para alcanzar sus primeras semifinales en el 'Grand Slam' en 35 apariciones.
Wawrinka, que había caído en los cuartos de final de los anteriores tres 'grandes', fulminó al ganador en Wimbledon sin enfrentarse a ninguna bola de 'break' en contra. El dato sin duda dice muy poco de un Murray que apenas existió sobre la central neoyorquina.
El primer set fue el más igualado, con ambos intercambiando golpes y guardando bien su saque. Sin embargo, el suizo apretó en un interminable décimo juego y tomó ventaja en el partido apuntándose el primer parcial al resto (6-4). Wawrinka no bajó el nivel y se mantuvo impenetrable.
En el sexto juego del segundo set tomó de nuevo una ventaja que el escocés no estuvo ni cerca de recuperar. Así pasaron los juegos y el suizo se puso 2-0. En ese momento, cuando el gran tenista aprovecha para venirse arriba, Wawrinka no vaciló y no hizo ninguna concesión que hiciese meterse en el partido a su rival de categoría.
Lejos de eso, primero con un error no forzado y después con una doble falta, Murray dejó escapar su saque en el tercer juego del a la postre último set. No necesitaba más motivación para ganar un Wawrinka que parece haber recuperado su mejor versión, la mostrada también al inicio de la temporada y que le ha llevado a cuatro finales en este 2013.