Durante una visita a la localidad lucense de Burela, reconoció ante los medios que la creación de empleo es el "objetivo prioritario" del Gobierno de España y eso, dijo, "exige adecuar el mercado de trabajo a las nuevas exigencias".
Comprometió por parte del Gobierno "todos los esfuerzos" y "sudar la camiseta" para convencer a empresarios y sindicatos con el fin de lograr "una reforma laboral acordada".
Convencido de que la mejor reforma laboral "es aquella que se acuerda", Blanco no quiso escapar a la posibilidad de que ese entendimiento no sea posible, por lo que ya avanzó que aún en ese caso "no vamos a abdicar de nuestra responsabilidad en este momento".
"Si tras el esfuerzo y el diálogo que vamos a intensificar en las próximas horas no somos capaces de alcanzar un acuerdo, no abdicaremos y presentaremos al conjunto de fuerzas políticas una propuesta de acuerdo para acodar las medidas y, en su caso, aprobarlas en el parlamento", apuntó.
Blanco incidió en que se "intensificarán" lo que ya son reuniones permanentes con este objetivo y repitió la intención de realizar "un esfuerzo hasta el límite" para tratar de cerrar un acuerdo.
Por otra parte, y sobre la posibilidad de estar ante una nueva tregua de ETA para que la izquierda abertzale pueda tener cabida en las próximas elecciones, Blanco pidió a los populares que actúen "desde la responsabilidad", y sentenció: "En relación con ETA, no hay tregua".
Recordó luego que cada vez son "más" los detenidos de la banda terrorista, los comandos desarticulados y, precisó, "cada vez ETA es más débil y el Estado de derecho es más fuerte, que es la única vía para conseguir el objetivo de acabar definitivamente con la banda terrorista".
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