La CE advierte a Francia de que las ayudas al automóvil deben respetar las normas

INFORMATIVOS TELECINCO / EFE 04/02/2009 20:10

París ha anunciado un plan de apoyo a la industria del motor con una dotación de entre 5.000 y 6.000 millones de euros y, aunque aún no ha comunicado las medidas concretas, distintos medios apuntan que el Gobierno exigirá a los fabricantes, como contrapartida a las ayudas, que compren los componentes a suministradores franceses.

La comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, recalcó al secretario de Estado de Industria francés, Luc Chatel, en un encuentro en Bruselas, que condiciones como ésa van en contra del derecho comunitario y suponen, además, un riesgo de "vuelta al proteccionismo".

Kroes consideró que eso no beneficiaría a Francia ni a los fabricantes franceses ni a ningún otro Estado miembro y dejó claro que la solución a la crisis no está en "levantar barreras dentro de Europa".

Chatel aseguró, por su parte, que las medidas que está estudiando París no tienen carácter proteccionista y confirmó la intención de su Gobierno de cumplir sus obligaciones bajo la legislación europea.

En declaraciones a los periodistas antes de reunirse con la comisaria, el secretario de Estado no ofreció detalles sobre el plan francés de apoyo al automóvil y se limitó a explicar que el objetivo es "salvar" a una industria que atraviesa una situación de crisis "absolutamente excepcional".

Hizo hincapié en que "no se trata de medidas proteccionistas" y recordó que en Francia operan compañías de otros países de la UE que también podrán beneficiarse de las ayudas.

Recalcó que el apoyo está dirigido a los constructores y al resto de operadores del sector, "sea cual sea su nacionalidad".

Chatel aludió a medidas estructurales para mejorar la competitividad, a otras centradas en la innovación y, por último, a la mejora del acceso a financiación, un problema acuciante para los fabricantes de automóviles de todo el mundo.

Kroes apuntó que Bruselas es favorable a introducir medidas de apoyo a la demanda, como incentivos para la sustitución de los vehículos viejos por otros menos contaminantes, y también respalda las iniciativas para aliviar el efecto de la crisis en los trabajadores, como los esquemas de despido temporal.

La comisaria recordó, asimismo, que la normativa sobre ayudas de Estado admite las subvenciones dirigidas a incentivar la innovación y la reducción de emisiones.

Además, para ayudar a las empresas a superar la crisis financiera, ha ampliado el catálogo de acciones que pueden poner en marcha los Gobiernos, como las garantías estatales o los préstamos subvencionados para invertir en "productos verdes".

Las supuestas intenciones del Gobierno francés de condicionar sus ayudas a las empresas automovilísticas a que adquieran sus componentes a empresas del país suscitan reservas no sólo en la Comisión sino también en otros países.

El titular italiano de Políticas Europeas, Andrea Ronchi, quien también se ha entrevistado hoy con Kroes, ha dejado patente la preocupación de su Gobierno ante una medida que calificó de "proteccionista".

Para Italia, este planteamiento resulta "inaceptable", señaló Ronchi, que advirtió de que Italia "dará la batalla" si la iniciativa francesa sale adelante.