Así se desprende de la memoria de la CNMV de 2008 que fue presentada hoy por su presidente, Julio Segura, ante la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso y en una posterior rueda de prensa, en la que quitó importancia a este aumento porque, dijo, lo que importa es el contenido de los expediente.
Segura explicó que las situaciones de crisis suponen un "caldo de cultivo" favorable para la afloración de comportamientos "inadecuados" ante la presión competitiva que sufren los agentes por colocar determinados productos.
Los expedientes de 2008 se refieren a la comisión de 22 presuntas infracciones, relacionadas con abuso de mercado, la vulneración del régimen de comunicación de participaciones significativas o por el incorrecto suministro al mercado de información financiera o en procesos de opa.
Segura explicó que tanto la tipología de las faltas como los medios de inspección de que dispone la CNMV son susceptibles de notables mejoras para aumentar su eficacia.
Por ello, y dado que es poco probable que en el actual periodo de sesiones se modifiquen la normativa para que en españa haya un modelo de supervisión financiera "twin peaks" -compartido entre CNMV y Banco de España-, la CNMV presentará al Gobierno en el tercer trimestre una propuesta para modificar el régimen sancionador.
El objetivo es que la ley reconozca al supervisor bursátil la misma capacidad sancionadora de la que disfruta la Comisión Nacional de la Competencia (CNC).
La CNMV recibió el año pasado 875 informes de auditoría sobre cuentas anuales del ejercicio 2007, de los que el 96 contenían una opinión favorable.
Respecto a las cuentas de 2008, se observa que el entorno económico de mayores dificultades "está generando tensiones en las cuentas de los emisores" porque está bajando el número de auditorías con opinión favorable, advirtió Segura.
En su informe a la Comisión, Segura destacó que, aunque las competencias de la CNMV en materia de estabilidad "sistémica y solvencia" son muy limitadas, la evolución de la crisis ha demostrado la importancia de la supervisión de mercados y valores.
En este sentido, recordó que los problemas de solvencia tienen su origen en "pautas inadecuadas de conducta" de los agentes participantes en los mercados.
Añadió que, sin las deficiencias observadas en aspectos como la información disponible sobre productos o emisores, la resolución de los conflictos de interés o las prácticas de gobierno corporativo, "algunas de las manifestaciones de la crisis no se habrían producido o lo habrían hecho con una intensidad menor".
Respecto a las medidas restrictivas adoptadas por el supervisor respecto a las ventas en corto, señaló que parece que sus efectos adversos en términos de eficiencia y liquidez del mercado superan su efectividad para contener episodios de inestabilidad excesiva de las cotizaciones.
Segura apuntó que, aunque parece que lo peor ya ha pasado, no se puede descartar que las instituciones de inversión colectiva vayan a padecer problemas de liquidez, máxime en el caso de los fondos que invierten en renta fija o deuda corporativa, "mercados que están en situación de sequía".
En lo que respecta a los fondos inmobiliarios, dijo que, al parecer, el proceso de disminución del patrimonio y de aceleración de los reembolsos "se ha parado o estabilizado", por lo que da la impresión de que "lo peor haya pasado".
Durante su intervención en el Congreso, Segura defendió la actuación de la CNMV ante la suspensión de los reembolsos del fondo Banif Inmobiliario FII y en otros asuntos como el proceso de opas por Endesa.