Según la OCU, de momento los consumidores sólo conocen lo que ha aparecido en los medios de comunicación, ya que actualmente en la web de la compañía en España no se ha publicado ninguna información al respecto. Por este motivo, OCU considera "absolutamente necesario explicar los posibles riesgos de estas chocolatinas para los consumidores, así como ayudar a los usuarios a identificar aquellas que potencialmente puedan estar afectadas por la retirada".
En otros países como Bélgica se han facilitado más datos como las fechas de caducidad de productos potencialmente peligrosos, por lo que OCU pide disponer de estos mismos datos para el mercado español.
La organización opina que en estos momentos, a falta de más detalles, la medida puede generar alarma y parece desproporcionada a priori. Por este motivo, OCU pide a la empresa y a las autoridades sanitarias más detalles para entender la gravedad del asunto y que los consumidores puedan actuar en consecuencia.
La organización de consumidores ha solicitado datos como la situación de fábricas afectadas, tamaño de los plásticos aparecidos, número de lotes afectados en el mercado español e instrucciones claras para que los clientes puedan identificar estos productos y cómo proceder para la devolución de los productos.