La reunión se ha desarrollado dentro de la máxima discreción y ha sido al más alto nivel.
Los negociadores decidieron volver a reunirse tras el encuentro del sábado, al que se incorporó el ministro de Trabajo y al que asistieron también el jefe de Gabinete de la Presidencia del Gobierno, los secretarios generales de CCOO UGY y el presidente de la CEOE.
Tanto el Gobierno como los sindicatos manifestaron la dificultad de alcanzar un acuerdo. Por este motivo, el Ejecutivo hará la reforma a través de un decreto-ley acordado con los grupos parlamentarios.
Nuevas reuniones
Los sindicatos tienen en su agenda una nueva reunión de la mesa del diálogo social esta semana y otra la próxima para intentar cerrar el acuerdo.
"Hemos trabajado para mantener una reunión esta semana y otra la que viene", indicaron al tiempo que añadían que "el Gobierno podría aprobar el decreto la semana del 11 de junio (la próxima semana) o, en todo caso, la siguiente".
Líneas de desacuerdo
Por el momento, los sindicatos sostienen que permanece el desacuerdo con la patronal en torno al coste del despido y reconocen que las posiciones respecto a estas cuestiones se han "enquistado".
En un comunicado, tanto CC.OO. como UGT constataron que "persisten las diferencias entre las partes en torno a algunos de los aspectos de las relaciones de trabajo que vienen siendo tratados en la mesa de Diálogo Social".
"Las partes entienden que todavía hay margen para el acuerdo, por lo que han decidido continuar reuniéndose en los próximos días", añadieron.
Así pues, su voluntad es la de seguir negociando a la espera también de que el Gobierno fije posición, después de haberse mantenido al margen de las conversaciones entre sindicatos y patronal en el último tramo de las negociaciones.
Semana definitiva
El 31 de mayo era el límite que, en principio, marcó el Gobierno para llegar a un pacto sobre la reforma, pero el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, ha dado una tregua de "algunos días" al diálogo social, aunque ha advertido de que esta semana "será la definitiva".
CCOO y UGT se han mostraron pesimistas, porque, según han explicado, la patronal mantiene sus posiciones "maximalistas" sobre el abaratamiento y la ampliación de las causas objetivas del despido o la rebaja de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social.
Para el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, lo más importante "no es que haya acuerdo o no", sino que se acometa la reforma, si bien, cree que sería mejor que hubiera consenso.
Aunque Díaz Ferrán afirmó el viernes que hasta el último momento se puede llegar a un acuerdo, reconoció que "los temas se pueden complicar o puede haber un aspecto en el que no se aproximen posturas".
El 11 de junio es la fecha que baraja el Gobierno para que el Consejo de Ministros estudie la reforma laboral, ya sea pactada con los agentes sociales o con los partidos políticos.
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