Con el dato de julio, la facturación de la industria encadena cinco meses de descensos, mientras que los pedidos del sector registran ya seis meses consecutivos a la baja.
La industria amortiguó en julio la caída interanual de su cifra de negocios, ya que en junio experimentó una reducción del 6,7%. No ocurrió lo mismo con las entradas de pedidos, que acentuaron su descenso desde el 1% de junio al 2,8% de julio.
Corregido el efecto calendario, la cifra de negocios de la industria se contrajo un 6,1% en julio en tasa interanual, frente a la reducción del 5,4% registrada en junio. Los pedidos, por su parte, bajaron un 6,4%, tasa más de cinco puntos inferior a la de junio.
En términos mensuales (julio sobre junio), la facturación de la industria subió un 2,4% en el séptimo mes del año, siendo ésta la primera tasa mensual positiva en este mes dentro de los últimos tres años. En contraste, las entradas de pedidos se contrajeron en julio un 3,3% respecto a junio, acentuando así las caídas experimentadas en este mes en los dos años anteriores.
En los siete primeros meses del año, la facturación de la industria acumula un descenso medio del 3%, mientras que las entradas de pedidos registran una caída del 2,4% en el mismo periodo.
LOS BIENES INTERMEDIOS Y DE EQUIPO LASTRAN LA FACTURACIÓN.
El retroceso interanual de la facturación industrial en julio se debió, sobre todo, a los bienes de equipo y a los bienes intermedios. Los primeros registraron una caída interanual del 6,3%, lastrados, principalmente, por la fabricación de vehículos de motor. Los bienes intermedios, por su lado, experimentaron una corrección interanual del 3,9%, especialmente por el retroceso de la metalurgia.
La energía fue el único sector con repercusión positiva en el índice, al elevar su facturación un 13,2% en julio por la subida de las coquerías y refino de petróleo.
BAJAN LOS PEDIDOS.
Por su parte, la entrada de pedidos de la industria bajó un 2,8% durante el séptimo mes del año en comparación con el mismo mes de 2011.
Por sectores, la energía fue el sector con una mayor repercusión positiva en el índice, al haber registrado un aumento de los pedidos del 12,8% en tasa interanual.
Las entradas de pedidos experimentaron cifras negativas principalmente en los bienes de equipo (-12,9%) y en los bienes intermedios (-4,5%), lastrados, respectivamente, por la fabricación de vehículos de motor y la metalurgia.