Andrés del Campo renueva su mandato como presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes

EUROPA PRESS 09/06/2015 15:00

En concreto y con esta designación, Del Campo renueva su mandato por sexta vez consecutiva al frente de Fenacore, donde ejerce la presidencia desde el año 1996.

En su reelección, las comunidades de regantes valoraron además de su implicación y carácter conciliador, su amplia experiencia en el marco internacional, tras más de 16 años como máximo dirigente de la Comunidad Euromediterránea de Regantes (EIC), representando los intereses de los agricultores regantes de Europa y norte de África.

Además, desde 2002 Del Campo es también miembro del Grupo de Coordinación Estratégica (SCG) para la implementación de la Directiva Marco de Aguas de la Comisión Europea.

De esta forma, su papel en el ámbito europeo se centrará en impulsar una PAC mucho más racional, capaz de compensar el desfase que existe actualmente entre el precio de los productos agrarios y el coste de producción.

Según Del Campo, se vende a precios de los años ochenta, pero se produce con costes del año 2015, provocando la pérdida de competitividad del sector agrario español en los mercados internacionales.

En el marco nacional, su principal reto a corto plazo es conseguir de las administraciones responsables unas tarifas eléctricas adaptadas a la singularidad del uso de la energía para los diferentes tipos de regadíos.

Asimismo, entre sus objetivos, está también desarrollar alternativas que disminuyan los costes energéticos como una central de compras de energía única para todo el regadío o impulsar la producción de energía distribuida para autoconsumo en las zonas regables. Esta medida permitiría reducir la dependencias de las compañías eléctricas y rebajar los costes fijos de la factura de energía, que en el caso de los regantes asciende a más del 70% del total.

Fenacore es una asociación sin ánimo de lucro e independiente políticamente, creada en 1955, que agrupa a las entidades dedicadas a la administración del agua para riego, tanto superficial como subterránea, con el objetivo de aunar esfuerzos y voluntades en la defensa de sus legítimos intereses y derechos de uso del agua.