Avon obtuvo un beneficio neto atribuido de 164,2 millones de dólares (117 millones de euros) en el tercer trimestre del año, lo que supone un descenso del 1% respecto al año pasado, mientras que sus ventas aumentaron un 6%, hasta 2.762,4 millones de dólares (1.974 millones de euros).
"Los resultados del trimestre reflejan las dificultades en Brasil, que han provocado mayores interrupciones de lo previsto, lo que tuvo un significativo impacto en los resultados", dijo Andrea Jung, presidenta y cosnejera delegada de Avon.
"Dado el actual entorno operativo, la compañía ya no espera alcanzar los objetivos fijados de crecimiento de las ventas y de los márgenes", añadió.
En los nueve primeros meses del año, la compañía obtuvo un benefico atribuido de 514 millones de dólares (367 millones de euros), un 36% más, mientras que sus ventas aumentaron un 7%, hasta 8.247,9 millones de dólares (5.891 millones de euros).
Por otro lado, Avon ha informado de que recibió una citación por parte de la Comisión del Mercado de Valores (SEC) en relación con los contactos que hubiera podido mantener la empresa con distintos analistas.