El BCE mantiene los tipos de interés y revisa a la baja las previsiones de crecimiento

AGENCIA EFE 04/06/2009 08:44

Respecto a los tipos, el presidente del BCE, Jean Claude Trichet, dijo en la rueda de prensa posterior a la reunión de consejo de gobierno celebrada en Fráncfort que son "apropiados", aunque no descartó recortes futuros pues "no se ha decidido que ya estemos en el nivel mínimo".

La tasa rectora para las principales operaciones de refinanciación en la eurozona está, tras el recorte de 25 puntos básicos aplicado en mayo, en el 1 por ciento.

El BCE también dejó inalterada la facilidad marginal de crédito por la que presta dinero a los bancos, en el 1,75 por ciento, y la facilidad de depósito, que sigue en el 0,25 por ciento.

La única novedad en política monetaria que hoy proporcionó BCE a los mercados financieros, que ya contaban con que no habría cambios en los tipos, fueron los detalles técnicos del programa de compra de cédulas hipotecarias y territoriales anunciado en mayo.

El BCE precisó que las compras, por un monto total de 60.000 millones de euros, se distribuirán en la eurozona, comenzarán en julio y se completarán, como muy tarde, en enero de 2010.

Las adquisición será en paquetes por un volumen de 500 millones de euros o más, pero en ningún caso menor de 100 millones, y se realizará en el mercado primario, si se trata de cédulas de nueva emisión, o en el secundario, si se refiere a las ya existentes.

No hay decisión por el momento sobre el porcentaje a adquirir en cada mercado y en consecuencia en que medida pondrá el BCE en marcha la máquina de hacer dinero.

Trichet destacó que las cédulas deberán tener una calidad AA o equivalente en alguna de las principales agencias de calificación -Fitch, Moody's, S&P o DBRS- y en ningún caso menos de BBB-Baa3.

El presidente del BCE aseguró que el consejo de gobierno tomó la decisión por unanimidad, sin presiones y en plena independencia.

La coletilla de Trichet y no fue la única, responde a unas declaraciones de la canciller alemana, Angela Merkel, en las que cuestiona con insólita claridad la independencia de BCE.

"Observo con alto grado de escepticismo la extensión de los poderes de la Reserva Federal de Estados Unidos y del Banco de Inglaterra; incluso el Banco Central Europeo se ha plegado de alguna manera a las presiones internacionales", dijo Merkel, contraria a las medidas "no convencionales" que aplica y se dispone a aplicar el BCE para paliar los efectos de la crisis.

Trichet reveló hoy que el miércoles habló por teléfono con la canciller y que ésta no sólo reconoció la independencia del BCE sino que dio por sabido que sus decisiones son independientes.

Más sobria fue su expresión al informar de los resultados del último análisis económico, que obligó al BCE a revisar drásticamente a la baja las previsiones de crecimiento para 2009 y 2010.

El BCE pronostica ahora una contracción del Producto Interior Bruto (PIB) para la zona del euro en 2009 de entre el 5,1 y el 4,1 por ciento, frente a la media del 2,7 por ciento previsto en marzo.

El BCE pronosticó en marzo un estancamiento de la actividad económica en la eurozona en 2010 y ahora considera que se situará entre el menos 1 por ciento y el 0,4 por ciento.

Además, el BCE revisó a la baja sus pronósticos de inflación debido a la debilidad de la actividad económica y la caída de los precios de las materias primas.

El BCE prevé una tasa de inflación para 2009 de entre el 0,1 y el 0,5 por ciento y de entre el 0,6 y el 1,4 por ciento en 2010.

En marzo, la autoridad monetaria europea había previsto una tasa de inflación en 2009 media del 0,4 por ciento.

El BCE considera que actualmente hay estabilidad de precios a medio plazo, lo que define como una tasa de inflación cercana pero siempre por debajo de 2 por ciento.

Trichet se mostró confiado en que la economía de la zona del euro presentará tasas de crecimiento positivas a partir de mediados de 2010 y consideró la posibilidad de bajar más los tipos si es necesario, pero afirmó que el nivel actual es adecuado de momento.