En el comunicado remitido por la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Iberia indica que la cifra de negocio llegó a 5.222 millones de euros, lo que frente a los 5.304 millones del año anterior supone una caída del 1,54 por ciento.
Según explica la aerolínea en una nota, los ingresos de explotación, que incluyen únicamente las partidas recurrentes, llegaron a 5.450 millones, un 1,3 por ciento menos que un año antes, mientras que los gastos de explotación fueron de 5.529 millones, lo que representa frente a los 5.238 millones de 2007 un incremento del 5,5 por ciento.
El presidente de Iberia, Fernando Conte, que presentó los resultados en rueda de prensa, destacó la dificultad que ha supuesto 2008 para el sector aéreo, periodo en el que las compañías han perdido en su conjunto 5.000 millones de dólares, y se congratuló de que Iberia "ha tenido beneficios un ejercicio más".
Los ingresos por pasaje cayeron un 2,5 por ciento, y un 1,8 por ciento los provenientes del handling (servicios en tierra), mientras que aumentaron los de mantenimiento un 8,7 por ciento y los de carga, un uno por ciento.
Uno de los gastos que más se incrementó es el correspondiente al combustible, 521 millones de euros hasta 1.666 millones, con un aumento del 45,5 por ciento, repercutiendo un 30 por ciento en el conjunto de los gastos del grupo.
De cara a 2009, Conte espera que si se mantienen los precios actuales del combustible se puede conseguir un ahorro de entre 200 y 300 millones de euros.
Los gastos de personal descendieron de 1.444 millones de euros de 2007 a los 1.321 millones de 2008, lo que supone un ahorro de un 8,51 por ciento.
Al finalizar el ejercicio, el balance de situación consolidado refleja la sólida posición financiera que mantiene la compañía, con un patrimonio neto de 1.564 millones de euros y con un saldo disponible de 2.272 millones de euros, según la empresa.
En su presentación el presidente de Iberia se refirió a la posible fusión con British Airways y destacó que será a lo largo del marzo cuando se tome una decisión al respecto, aunque se mostró optimista.
También aludió al impacto que ha supuesto la entrada del tren de alta velocidad en el corredor entre Madrid y Barcelona, y que en el caso de Iberia ha sido de una reducción del 30 por ciento, pese a que se ha reducido la oferta.
No obstante, Conte indicó que para el presente año se va a mantener la oferta para el Puente Aéreo, y que se pueden reajustar los otros vuelos que Iberia tiene entre ambas ciudades.
La productividad del personal del grupo (medida en AKO por empleado) aumentó un 3,8 por ciento, y la utilización de la flota- medida en horas bloque por avión- se incrementó un 4,3 por ciento, hasta alcanzar 10 horas diarias por avión.
El número de aviones operativos pasó de los 136 de 2007 a 119 al cierre de 2008, con un descenso de un 12,5 por ciento.
En cuanto a la plantilla, tuvo un descenso de un 4,2 por ciento, al pasar de los 22.515 empleados en 2007 a los 21.578 al cierre del último ejercicio.
Con el fin de reajustar los costes, el presidente señaló que se va a acelerar el plan de prejubilaciones, y anunció que en el convenio con los pilotos con los que ya se ha firmado un preacuerdo, se está redactando el acuerdo definitivo.