En la iniciativa, que recoge Europa Press, los nacionalistas gallegos valoran los esfuerzos modernizadores que está haciendo la Agencia Tributaria (AEAT) para agilizar sus procedimientos administrativos.
Sin embargo, dada la "baja penetración" del acceso a Internet en España --un 68% según Eurostat, doce puntos por debajo de la media UE--, el BNG cree que la implantación de estas nuevas obligaciones debe hacerse a un "ritmo gradual" y no de forma universal como se está haciendo, sin tener en cuenta la "dimensión o capacidad para disponer de medios electrónicos" de los contribuyentes.
"La nueva obligación obligará, en un momento de dificultades económicas, bien a asumir directamente con mayores costes la implantación de sistemas electrónicos, bien a recurrir a asesorías externas la supervisión y acceso a la Dirección Electrónica Habilitada, con los riesgos que supone además recibir las notificaciones oficiales a través de un tercero", señala el BNG.
ADAPTAR LOS PROCEDIMIENTOS
Por eso, la formación gallega reclama al Gobierno "medidas transitorias" que permitan "acomodar las necesidades de funcionamiento ágil y mejora de la AEAT en la tramitación de sus expedientes administrativos con las justas exigencias de los colectivos afectados", a los que se deberían adaptar los procedimientos en función de su "capacidad real" y evitando una "mayor carga económica".
Y, en concreto, el BNG propone que todas las delegaciones y administraciones de la Agencia Tributaria en España cuenten con servicios gratuitos de asistencia a través de los cuales los profesionales autónomos y microempresas puedan presentar sus declaraciones tributarias y recibir notificaciones electrónicas.
Junto con la proposición no de ley, los nacionalistas gallegos también han registrado una pregunta escrita dirigida al Gobierno para saber por qué ha decidido suprimir la posibilidad de presentar estas declaraciones en papel y limitar su presentación a la vía telemática, así como por la "disposición" de la Agencia Tributaria a mantener las dos vías durante una "fase de transición".
"¿Es consciente de que existe un buen porcentaje de población a las que les resulta muy complicado proceder a tributar por Internet? ¿Va el Ministerio de Hacienda a tener en cuenta estos problemas y a mantener el formulario en papel?", añaden, insistiendo en que les parece una "buena idea" el cambio a un método "útil, práctico y más cómodo" siempre y cuando no se perjudique a quienes no tienen acceso a Internet o no saben utilizarlo para estos fines.