Bruselas vigilará que Italia aplique las reformas prometidas para reducir la deuda

EUROPA PRESS 27/10/2011 05:37

Los líderes europeos se han felicitado este jueves por el nuevo plan de ajuste anunciado por el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, para recortar el nivel de deuda --que incluye entre otras medidas el retraso de la edad de jubilación a 67 años o una reforma laboral--, pero han pedido a la Comisión que vigile que se llevan efectivamente a la práctica.

"Vamos a respetar nuestros compromisos, como siempre hemos hecho", ha dicho Berlusconi a la salida de la reunión.

"Invitamos a la Comisión a presentar un análisis detallado de las medidas y vigilar su aplicación, y a las autoridades italianas a presentar a tiempo toda la información necesaria para esa evaluación", señalan las conclusiones de la cumbre del Eurogrupo.

"La clave es la aplicación. No es suficiente presentar compromisos. Ahora es necesario verificar si se aplican realmente", ha dicho el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, al término de la reunión.

"La presión que los líderes ejercen unos sobre otros se ha vuelto mucho más eficaz, como muestran los acontecimientos de los últimos días", ha dicho por su parte el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en referencia a las exigencias que los líderes europeos han planteado a Berlusconi desde la cumbre del pasado domingo y que han acabado surtiendo efecto.

"Ningún país puede permitirse subestimar el posible impacto de la deuda pública o burbujas inmobiliarias en otro país de la eurozona en su propia economía. Serán castigados por los votantes y por los mercados", ha apuntado.

Los líderes de la eurozona celebran el plan de Italia y piden a Berlusconi que presente de forma "urgente" un "calendario ambicioso" para aplicarlas. En particular, se felicitan por el compromiso del Gobierno italiano de reformar la legislación laboral, en concreto las normas y procedimientos de despido, así como de revisar el sistema de seguro de desempleo a finales de 2011, "teniendo en cuenta las limitaciones presupuestarias".

Por lo que se refiere a la reforma de las pensiones, el Eurogrupo respalda el plan de retrasar la edad de jubilación hasta los 67 años en 2026 y pide a Italia que defina antes de fin de año cómo lograrlo.

Finalmente, los líderes europeos piden a Italia un mejor uso de las ayudas regionales europeas, reducir la burocracia, acabar con las tarifas mínimas en los servicios profesionales y proseguir en la liberalización de los servicios públicos locales.