La CE amplía la investigación sobre las ayudas británicas a Northern Rock

AGENCIA EFE 07/05/2009 09:58

El ejecutivo de la UE comenzó a investigar en abril del pasado año las ayudas, que supusieron la primera operación de rescate de una entidad británica tras el estallido de la crisis financiera.

La CE considera necesario extender el análisis después de que Londres haya adoptado "sustanciales modificaciones" a las medidas iniciales, notificadas a Bruselas el 30 de marzo de este año.

Entre las correcciones, destaca la escisión de la entidad en un "banco saneado" -que asumirá las actividades comerciales-, de los activos contaminados, donde se engloban la mayor parte de los prestamos hipotecarios que serán liquidados.

El ejecutivo comunitario examinará si estas modificaciones permiten restablecer la "viabilidad a largo plazo" del banco, así como el riesgo de distorsiones para la competencia.

En diciembre de 2006, Northern Rock era el quinto banco hipotecario británico, con un balance total de 150.000 millones de euros.

Sin embargo, la crisis económica y financiera le obligó a acudir en busca de ayuda al Banco de Inglaterra, que le concedió un crédito ilimitado (cerca de 25.000 millones de libras, equivalentes a más de 31.000 millones de euros), para evitar su quiebra.

Esa ayuda, que recibió el visto bueno de Bruselas en diciembre de 2007, debía limitarse a seis meses.

Londres trató de encontrar un comprador para reflotar la entidad, pero finalmente, en febrero del pasado año, acabó optando por su nacionalización.

Según la legislación europea de competencia, para aceptar nuevas ayudas al banco, más allá de los seis meses citados, las autoridades británicas deberían garantizar su viabilidad futura sin inyecciones adicionales de dinero público y, además, Northern Rock tendría que reducir su tamaño.

Finalmente, las autoridades británicas remitieron un conjunto de cambios que serán estudiadas por la CE.

El nuevo plan prevé la escisión en dos entidades, una que englobaría los activos sanos, así como la plataforma de concesión de créditos hipotecarios y los depósitos de particulares; y una segunda estructura que agruparía los activos contaminados, que incluiría la mayoría de préstamos hipotecarios concedidos por el banco en el pasado.

Esta segunda estructura será liquidada, según los criterios de solvencia, y las pérdidas generadas por los antiguos prestamos hipotecarios de riesgo que concedió Northern Rock deberán ser asumidas por el Estado británico.

La CE ha pedido a Londres un informe completo para conocer todos los detalles de esta iniciativa y, ha recordado a las partes interesadas que pueden exponer sus puntos de vista.