En concreto, esta apuesta gastronómica de Alberto Chicote y Pedro Olmedo combina la cocina de calidad con los platos tradicionales madrileños, en un espacio que permite al cliente viajar a principios del siglo XX con vistas a la Puerta del Sol y a Preciados.
De esta forma, todos los clientes podrán disfrutar estos días de las campanadas por la noche, además, el espacio Puertalsol ha diseñado para el día 30 un menú pre-uvas para posteriormente tomar las uvas en la noche previa a Fin de Año.
La noche del 31 de diciembre los clientes que lo soliciten bajo previa reserva, podrán disfrutar en exclusiva de la entrada del Nuevo Año cenando en la terraza con vistas al reloj, que este año cumple un siglo y medio de vida.