La Fed, "muy preocupada" por el riesgo de contagio de la crisis a las filiales de bancos europeos en EEUU

EUROPA PRESS 18/08/2011 16:58

La Reserva Federal de EEUU (Fed) y otros reguladores estadounidenses han elevado el grado de vigilancia sobre las filiales de bancos europeos presentes en el país norteamericano ante la creciente preocupación de que la crisis de deuda que afecta al Viejo Continente dé el salto al sistema bancario estadounidense a través de estas entidades, por lo que recientemente se han incrementado las exigencias de información y los contactos con directivos de los bancos europeos, según informa el diario 'The Wall Street Journal'.

"Representantes de la Reserva Federal de Nueva York, que supervisa las operaciones en EEUU de muchos grandes bancos europeos, están muy preocupados sobre las dificultades de financiación en EEUU a las que se enfrentan los bancos europeos", reconoció al periódico un alto ejecutivo de una entidad europea que ha participado en las reuniones con las autoridades estadounidenses.

En este sentido, el rotativo de cabecera de Wall Street destaca como un síntoma de las posibles dificultades de los bancos europeos para obtener fondos en dólares el hecho de que este miércoles una entidad europea solicitara al BCE un préstamo de 500 millones de dólares a una semana, una vía de financiación que implica un sobrecoste respecto al interbancario y que no había sido empleada desde el pasado 23 de febrero.

"La Fed de Nueva York ha mantenido encuentros recientemente con las entidades (europeas) para evaluar su vulnerabilidad a una escalada de las presiones financieras", señalaron dos personas conocedoras de la situación, que indicaron que el supervisor ha solicitado más información a las entidades respecto a sus fuentes confiables de financiación para obtener los fondos necesarios en su operativa diaria en EEUU, llegando incluso en algunos casos a impulsar a los bancos a revisar sus estructuras en EEUU.

'The Wall Street Journal' recuerda que hasta el momento no se habían detectado problemas, en parte gracias a los programas de alivio cuantitativo de la Fed, que inundaron los mercados de dólares y que, según datos oficiales, llegaron en grandes cantidades a los bancos europeos.

Sin embargo, los reguladores estadounidenses ahora pretenderían prevenir la posibilidad de que los bancos europeos que se encontraran en problemas utilizaran los fondos de sus filiales estadounidenses, por lo que en los últimos tiempos han instado a estas entidades a transformar a sus filiales en EEUU en organizaciones con capacidad para autofinanciarse y aislarse en mayor medida de los potenciales problemas de sus matrices.