Inmobiliaria Chamartín se declara en concurso voluntario de acreedores

EUROPA PRESS 04/01/2016 10:51

En el edicto se explica que la empresa mantiene las facultades de administración y de disposición de su patrimonio, pero sometidas a la intervención de la administración concursal.

A partir de ahora, los acreedores deberán poner en conocimiento de la administración concursal designada la existencia de sus créditos en la forma que establece la Ley correspondiente. El plazo de esta comunicación es el de un mes a contar desde mañana, 5 de enero.

Inmobiliaria Chamartín, que integró en los primeros años de la crisis el 'lobby' inmobiliario conocido como G-14, estaba incluida en la lista de morosos que publicó el pasado 23 de diciembre la Agencia Tributaria, con una deuda de 20,5 millones de euros.

La empresa controlada por la familia Cutillas llegó a tener una deuda cercaba a los 1.800 millones de euro durante la crisis. En España, su actividad ha estado fundamentalmente centrada en el negocio residencial en Madrid y, por tanto, afectada por la crisis que ha atravesado el sector.

Fuera de las fronteras españolas, Inmobiliaria Chamartín también tiene presencia en Portugal y Alemania. En el país luso logró refinanciar en abril de 2013 hasta 1.000 millones de euros de deuda que tenía contraída con un conjunto de entidades financieras del país.

De esta forma, la empresa se convirtió en la primera inmobiliaria que refinancia toda su deuda de una sola vez en Portugal. En virtud del acuerdo, se aplazó el vencimiento de este pasivo en cinco años.

Previamente, Chamartín había comprado la portuguesa Amorim Inmobiliaria en 2006, en el marco de un plan de expansión que comprendía la apertura de otros treinta nuevos centros comerciales en países de Europa en un horizonte de cinco años.

No obstante, "la adversa evolución económica y la crisis financiera de la banca obligaron a la compañía a abandonar esta estrategia en 2009 y a iniciar el estudio de la refinanciación de la deuda", detalló la compañía.