Con este incremento las reservas se situaron por encima del promedio para esta época del año, indicó el Departamento.
El volumen de reservas la semana pasada fue un 0,6 por ciento superior a la semana precedente, cuando las reservas alcanzaron los 351,3 millones de barriles y fue un 15,5 por ciento superior al de un año antes.
El precio del crudo bajó un dos por ciento y finalizó en 48,14 dólares el barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York.
Las existencias de gasolina aumentaron en 3,2 millones de barriles, frente a un descenso de alrededor de dos millones que calculaban algunos analistas, hasta situarse en los 215,7 millones de barriles, un 5,8 por ciento menos que hace un año.
Los contratos de gasolina para entrega en abril rebajaron el precio anterior en seis centavos y terminaron la sesión a 1,36 dólares el galón (3,78 litros).
En cuanto a las existencias de productos destilados, que incluye el gasóleo de calefacción y el diesel, aumentaron en 100.000 barriles con respecto a la semana anterior y el total, de 145,5 millones, es un 28,5 por ciento superior al de 2008 en la misma época.
Los contratos de gasóleo para ese mes recortaron un centavo y finalizaron la sesión a 1,26 dólares/galón.
Estas cifras excluyen la Reserva Estratégica de Petróleo del Gobierno de Estados Unidos, que cuenta con 707,5 millones de barriles, 1,7 millones de barriles más que la semana anterior.
El total de existencias de crudo y productos refinados en Estados Unidos, incluida la Reserva Estratégica, alcanzó la pasada semana 1.749,8 millones de barriles frente a los 1.744,9 millones de barriles de la semana anterior.
Las refinerías petroleras en Estados Unidos operaron la semana pasada al 82,1 por ciento de su capacidad.