La falta de sueño tiene consecuencias muy evidentes en el día, tal y como indica Noticias 24. Cansancio acumulado, somnolencia, tristeza, cambios en el humor o ansiedad son algunos de los efectos que produce la falta de sueño en nuestros cuerpos.
Alteración del reloj biológico
Investigadores de la Universidad de Uppsala, Suecia, han descubierto que una noche sin dormir es suficiente para que la actividad de los genes que controlan el reloj biológico de las células se descontrole. Esos “cambios epigenéticos”, que son modificaciones reversibles en la expresión del ADN, afectan al control de los niveles de azúcar en sangre en el tejido graso y en los músculos. Además, incrementa la posibilidad de padecer diabetes.
Perdida de neuronas
La misma universidad sueca ha realizado un estudio publicado en la revista Sleep en el que se revela que dormir menos horas de las indicadas aumenta los niveles sanguíneos de dos moléculas indicadoras de daño neuronal: la NSE y la S-100B.
Aumento del apetito
Científicos han demostrado que la falta de sueño provoca que las neuronas del área del cerebro relacionada con el deseo de comer, la denominada como corteza cingulada, se activen con una fuera mayor a la normal.
Mal humor
Un estudio realizado en la Universidad de California ha detectado que la falta de descanso aumenta las ganas de discutir, debido a que la capacidad de manejar conflictos se ve seriamente afectada.
Dificultad en la toma de decisiones
Una investigación realizada por científicos de Berkeley y Harvard ha probado que el insomnio a corto plazo aumenta la sensación de euforia y la predisposición a tomar decisiones que sean arriesgadas. Por ello, uno de los investigadores que participó en el estudio, Matther Walker, recomienda a profesionales como médicos o pilotos que descansen lo suficiente antes de comenzar su trabajo.
Aumenta el estado de alteración
Una noche de fiesta, en la que evidentemente no se duerme, puede suponer en tu cuerpo un efecto similar a la de las anfetaminas, según un trabajo publicado en The Journal of Neuroscience. A pesar de ello, la cantidad segregada para intentar compensar la falta de sueño no es suficiente para evitar los déficits cognitivos de quien no ha dormido.
Posibilidad de sufrir alzhémier
Durante el sueño nuestro cuerpo elimina unas proteínas, las denominadas como ß-amiloides, que están relacionadas con el alzhémier y que se acumulan durante el día. Por ello, un día sin dormir provoca que esa limpieza necesaria no se realice, por lo que aumenta el riesgo de padecer demencia.
Alteración de la memoria
La mente se ve afectada si no cumplimos con unos horarios de sueño: se crean falsos recuerdos y aumenta la tendencia a la inclusión de hechos que no se han producido. Según una investigación publicada en el Journal of Sleep Research, no es pertinente elegir a testigos en juicios a quienes presenciaron un delito y llevaban mucho tiempo sin dormir.