La ola del melillero: el folclórico fenómeno ‘made in’ Málaga

Elsa Alonso 07/09/2017 16:28

La ola gigante se repite con periodicidad y eso ha sido suficiente para hablar de tradición y elaborar un vino blanco Pedro Ximénez en su nombre.

Se la conoce como 'La Ola del Melillero' por su origen: la subida repentina del nivel del mar en las costas malagueñas de Sacaba, La Misericordia, Huelin y La Malagueta se produce por la llegada a puerto del buque de alta velocidad que hace la ruta Málaga-Melilla. Se trata del ferry Millenium Dos, de la compañía Trasmediterránea.

El barco melillero llega a tierra con la delicadeza de una manada de elefantes los viernes a las nueve de la noche y todos los domingos a las siete y media de la tarde. Para los que desconocen sus horarios, es decir, para todo el turisteo extranjero, esta ola les cae como un jarro de agua fría y muchos son los que al huir en estampida pierden una nevera azul o una toalla.

Para otros, esta ola es motivo de diversión. ¿A quién no le gustaría coger una gigante en aguas normalmente tranquilas?

¿Por qué atraca el melillero arrasando?

Hay varias causas por las que se produce el 'tsunami' malagueño, pero todas tienen que ver con la frenada del barco en el dique: Cuando vira el sentido de las hélices y da marcha atrás para parar, pierde el equilibrio en ese efecto de reducción de la velocidad y acaba moviendo la masa de agua hacia arriba.

Claro, a veces es un problema de gobierno del ferry, otras, un asunto mecánico o un fallo electrónico y, en pocas ocasiones, por culpa de las condiciones meteorológicas adversas. Y es que, el viento siempre tiene algo que ver.

También influye el nivel del mar que haya en ese momento, la bajamar o la pleamar, así como un oleaje de mar de fondo que venga por la popa del barco. En cuanto a la salida ocurre la misma situación, ya que el barco sufre una gran aceleración una vez que abandona las aguas abrigadas del puerto.

Un vino muy tranquilo con nombre de ola salvaje

Hace un año, la bodega malagueña Victoria Ordoñez estrenó una nueva elaboración: la Ola del Melillero, un Pedro Ximénez de los Montes de Málaga. Es blanco seco y de una variedad de uva que estaba en inhabilitación desde hacía doscientos años.

"Sugerente, sorprendente e innovador". Con estas palabras lo definía para Europa Press Victoria Ordoñez.