Hace frío: cinco trucos fáciles (y útiles) para calentarte los pies en la cama

Cristina Abel Núñez 16/12/2017 12:00

¡Cuidado con lo que cenas!

Nutricionistas y endocrinos nos aconsejan por la noche equilibrar la dieta con vegetales, pero nada de ingerirlos crudos ni fríos. Unas verduritas al vapor, salteadas o hervidas para cenar, cuya elaboración nos llevará poco más de 15 minutos, te ayudarán a depurar y a mantener una buena circulación sanguínea.

Si esos vegetales los aderezas con unas buenas espeeltiempohoy.escias, canela, cúrcuma, jengibre, pimienta de Cayena o curry, estarás multiplicando la frecuencia cardíaca. Una buena hidratación a base de agua, alimentos que contengan vitaminas C, E y K y magnesio, además de aceites vegetales y frutos secos, te procurarán un descanso nocturno moderado.

Evita la cafeína y los lácteos

Si pensabas que un café calentito contrarresta la sensación de frío, sentimos defraudarte porque la cafeína provoca justo el efecto opuesto: comprime los vasos sanguíneos y limita la capacidad del cuerpo para entrar en calor. Las infusiones, los productos descafeinados o un buen caldito pueden ser una alternativa perfecta. ¡Ojo, los lácteos aumentan la sensación de frío!

Calcetines, nuestros mejores aliados

Es muy importante mantener los pies aislados de las bajas temperaturas y para ello es primordial que utilices unas buenas zapatillas de estar por casa (mejor de lana o con borreguito en su interior) y calcetines de fibras naturales. Advertimos que no vale cualquier calceta, el material con el que estén elaborados será clave para mantener una temperatura idónea.

La lana es el material estrella del invierno, no solo porque incrementa la temperatura, también mantiene a raya la humedad. El grosor es importante, para estar en casa apuesta por la comodidad, con modelos amplios y mulliditos.

Sube el termómetro con hidroterapia y masajes

Antes de ir a dormir es el momento perfecto para meter los pies en agua templada o bien realizar baños de contraste, como si estuvieras en un spa, porque activan la circulación. Si a la hidroterapia le sumas un buen masaje con cremas hidratantes elaboradas con esencia de menta, té o romero, podemos asegurarte efectividad casi al 100%.

Un truco infalible: calienta la crema en las palmas de tus manos y presiona firmemente los dos pulgares en la planta del pie y acaricia sin prisas la almohadilla plantar desde la base hacia el talón. Otra cosita: puedes preparar tu propia loción relajante con aceite de coco, caléndula, salvia y yogurt natural.

Calor humano, el más efectivo y gratificante

Si después de todos estos trucos no logras que tus pies entren en calor, siempre te quedará el calor humano. ¿Hay mejor excusa para una buena sesión de sexo que pedirle a tu pareja que te ayude a entrar en calor? En cuestión de segundos el riego sanguíneo se acelerará y tu termómetro se equilibrará con el suyo. Además, estarás tan ocupado en otras cosas que se te olvidará por completo que tenías los pies como tempanillos.

Advertencia

Cuando no logras subir la temperatura de tus pies y la situación es también una constante en épocas cálidas, deberías visitar a tu médico. Varias dolencias importantes, como los problemas de circulación, el fenómeno de Raynaud, lupus, hipotiroidismo, fibromialgia o ateroesclerosis, tienen entre sus síntomas más característicos los pies constantemente fríos. Prevenir es vivir.